¿Qué significa cumplir con las expectativas?

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¿Quiénes nos pueden exigir cumplir con las expectativas?

Recientemente, escuché por la radio que un periodista dijo:

– «La Afición espera que ese jugador cumpla con las expectativas»,

poco despues de contratarlo por muchos millones de euros.

Y me hizo pensar lo siguiente:

– «No solo la afición, también su equipo esperará que cumpla con las expectativas, y su Mánager, y por supuesto la Junta Directiva y los Accionistas».

Los Accionistas serán quienes más le exijan cumplir con las expectativas, porque quieren que su gran potencial y desempeño se refleje directamente en sus bolsillos, ¡Quieren Rentabilidad!.

¿Qué significa cumplir con las expectativas?

Si algo o alguien no satisface mis expectativas, eso significa que no era tan bueno como yo pensé que iba a resultar, y por lo tanto me ha decepcionado.

¿Qué o quiénes deben cumplir con las expectativas?

Respuesta:  Todo y todos.

Un producto puede o no cumplir con las expectativas de sus compradores, un dibujante o un vendedor podrán o no cumplir con las expectativas de sus jefes; un emprendedor puede o no cumplir con las expectativas de sus clientes o de sus consumidores.

Puede que muchos crean crean que es muy fácil calificar a alguien y decir: «cumple bien con las expectativas» o, «no está cumpliendo», pero es muy cierto que:

La mayoría de las veces no estamos en posición de decir que alguien cumple o no con las expectativas, por carecer de estudios y elementos técnicos para poder aseverar cualquier cosa.

Tanto en el deporte, como en el trabajo o en el emprendimiento,

¿Cómo se puede medir si uno cumple con las expectativas?

Con el fin de responder a esta cuestión, les comparto la Escala de rendimiento estándar (de 5 niveles) que aplica el Departamento de Recursos Humanos de la Universidad de Berkeley en California para sus propios miembros:

Nivel 1. Insatisfactorio.

El desempeño del individuo es consistentemente inferior a lo esperado en la mayoría de las áreas esenciales de responsabilidad y, no logra un progreso razonable hacia la consecución de las metas críticas.

Las metas críticas son los objetivos parciales más importantes porque se encaden unas con otras, si no se alcanza una meta parcial no se puede continuar con la siguiente, por eso son críticas, porque no se pueden pospone, el atraso de una significa el atraso de las que le siguen. Aquí las fallas y atrasos provocan que todo el proyecto se encadene negativamente.

Se aprecia que la persona necesita una mejora significativa en casi todas las áreas fundamentales.

Se recomienda trazar y monitorear un plan para corregir el desempeño, incluyendo cronogramas o diagramas de barras donde se puedan medir los progresos continuamente.

Nivel 2. Necesita mejoras.

El desempeño del individuo no cumple consistentemente con lo que se espera. Su desempeño no ha logrado cumplir con los objetivos en una o más áreas esenciales de responsabilidad, además de no cumplir con uno o más de los objetivos más importantes.

Se debe implementar un plan de desarrollo profesional para mejorar su desempeño, incluyendo cronogramas para medir los progresos.

Nivel 3. Cumple con las expectativas.

El individuo cumple consistentemente las expectativas en todas las áreas de responsabilidad, a veces posible y escasamente superando las expectativas.

En este nivel, la calidad del trabajo es buena en términos generales. Cumple también con la mayoría de las metas críticas, lo que quiere decir que entrega su trabajo en tiempo y forma, justo con lo que se esperaba de él.

Nivel 4. Supera las expectativas.

Demuestra un rendimiento que ha superado todas las expectativas en todas las áreas de responsabilidad que tiene asignadas, y, en términos generales, la calidad de su trabajo es excelente.

Los objetivos o metas anuales han sido alcanzadas en tiempo y forma, dejando una sensación de satisfacción y brillante cumplimiento.

Nivel 5. Excepcional.

El desempeño del individuo supera con creces las expectativas, debido a la excepcional calidad del trabajo realizado en todas las áreas de responsabilidad, arrojando globalmente una calidad de trabajo superior.

Para ser «excepcional» hay que incluir dentro de los logros:

A) La realización de un objetivo mayor o proyecto principal.

B) Haber logrado al menos una contribución única que haya impactado a toda la empresa, ya sea en ahorro de recursos, mejora de condiciones competitivas de la compañía, por ejemplo: Haber logrado una alianza estratégica o haber detectado una gran oportunidad de negocio.

 C) Haber contribuido directamente a un aumento significativo en los ingresos o facturación de la empresa. Aquí hacen la notación que cualquier empleado puede alcanzar esta calificación aunque no es lo común.

En lo personal, estimo que solamente los Directores Generales o CEO’s están en la posición de obtener la máxima calificación,

ya que son quienes llevan el timón de la empresa, la dirigen y toman las decisiones que pueden tener una mayor repercusión en los ingresos.

Los empleados de menor nivel difícilmente podrán tener una actuación que provoque un enorme impacto, y esto se debe a lo limitado de sus funciones, por carecer de las competencias suficientes para cambiar el curso de la compañía, tanto positiva como negativamente.

Los emprendedores, siempre deberían aspirar al nivel más alto de calificación.

Dado que el trabajo de los emprendedores tiene un carácter más solitario, a veces uno se pierde encontrando dificultad para calificarse a sí mismo con objetividad.

Buscar cierto grado de objetividad con respecto a su propio rendimiento es una de las prioridades de los emprendedores.

Para esto existe el Coaching, o la Consultoría externa y hasta los Grupos de Mastermind, esos donde uno busca recibir esa retroalimentación positiva que le permita desbloquearse de juicios dominados por el ego y/o la desmotivación.

¿En cuál de estos cinco niveles podríamos ubicar a la mediocridad?

Cada uno tendrá su propia opinión, Yo en lo personal ubicaría la mediocridad en el nivel 3, en el de «Cumple satisfactoriamente», y

es que aunque el individuo cumpla en tiempo y forma, siempre tendrá espacio de sobra para mejorar su rendimiento  hacia la excelencia.

Muchos pueden desarrollar el trabajo suficientemente útil, muy pocos son los que van más allá, los que dan la milla extra, los que buscan mejorar el producto, o implementar sus servicios, o en pensar en hacer mejor las cosas, principalmente para agregar valor.

Un buen profesional cumple con las expectativas que él o ella misma se ha auto-impuesto, esas que no le indica nadie; y esas expectativas deberían ser generalmente altas.

Hay que cumplir con las expectativas de unos mismo.

No es malo que uno tenga altas expectativas de uno mismo,

alguien te podrá tachar de iluso, y no deberías hacer caso mientras te encuentres avanzando en el camino de hacer que las cosas sucedan, o que estés en pos de alcanzar tus propias expectativas.

Espero que esta entrada les pueda ser de utilidad, pero no solo para medir el rendimiento de los demás, sino el de ustedes mismos, para que se auto-impongan una línea a la que deben llegar, y otra por debajo a la que nunca deben bajar. De todo esto se trata el Emprendimiento, de calificarnos y superarnos a nosotros mismos, no de compararnos con los demás.

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Fotografía de Pixabay libre de Derechos de Autor.

Fotógrafo: Sasin Tipchai.