Reportar Avances Clave del Éxito Mastermind | 427

La Importancia de Reportar avances a otros Profesionales | Formar parte de un Grupo Mastermind impulsa tu crecimiento profesional | ¿Cómo puede ayudarte el hecho de informar a tus compañeros Mastermind? | Los beneficios de emprender si te comprometes con colegas

La Importancia de Reportar Avances de actividades a los compañeros del Grupo Mastermind.

Reportar Avances Clave para Triunfar.

¿Sabías que si no te sientes presionado a cumplir difícilmente progresarás?

Una de las claves del éxito de los Grupos Mastermind es: «Sentirse obligado y comprometido a reportar avances y retrasos a otras personas».

En esta entrada del Blog y Podcast de Emprendimiento, quiero profundizar acerca de la importancia que tiene el hecho de reportar avances o informarle a alguien el progreso de un trabajo o de un proyecto.

Lo que es aceptado convencionalmente en un empleo.

Ya sean grandes o pequeñas, todas las empresas formales exigen que cada uno de sus empleados tenga muy claras tres cosas, y que las tenga por escrito:

A) Cada empleado debe tener sus funciones claramente definidas:

¿Qué va a hacer?, ¿Con qué lo va a realizar?, o sea ¿Cuáles son sus recursos?, ¿Con qué márgenes de libertad y maniobra cuenta?, luego

B) Tiene que tener claros sus objetivos:

¿A dónde tiene que llegar?, y/o ¿Qué Metas tiene que alcanzar?, y

C) ¿A quién le va a reportar o rendir cuentas?, por supuesto que a su Jefe. El empleado solo tendrá un Jefe (Principio de Unidad de Mando).

Éste empleado tendrá que reportar avances a su superior o informarle periódicamente acerca del desarrollo de todo su trabajo y funciones, hasta su correcta y total entrega, cumpliendo con tres factores principales:

Tiempo, costo y calidad.

En el caso de los emprendedores o de los empresarios independientes:

Los emprendedores no tienen jefes directos más allá de sus clientes o consumidores, y entonces:

¿Cómo se auto-gestionan?

¿Cómo se obligan a sí mismos a plantearse objetivos y perseguirlos hasta alcanzárlos?

¿Qué hace un empresario, un autónomo o un freelancer cuando no tienen a nadie a quien justificarle lo que hace o deja de hacer?

En una entrada anterior de este podcast de emprendedores, en la 362 comenté lo que es la Rendición de Cuentas Mutuas y su importancia dentro de los Grupos Mastermind.

He realizado esta entrada para profundizar acerca de la Importancia y la Utilidad de tener que dar justificaciones a alguien más que no sea tu jefe, en este caso, los compañeros de un Grupo Mastermind:

Premisas por las que debemos reportar a otros el desarrollo de nuestro trabajo o proyecto de emprendimiento.

De entrada, el término de Rendición de Cuentas puede sonar un poco como a castigo.

En alguna ocasión probablemente presenté malas notas o calificaciones escolares a mis padres, y no quería mostrárselas, porque me apenaban,

Sabía que me podían castigar, pero tuve que rendirles cuentas y justificarles las causas, y además debía hacer un compromiso serio para mejorarlas, con responsabilidad, de forma similar me sucedió con todos mis jefes.

Recuerdo que como muchos, cuando el profesor nos entrega una mala calificación, nos justificamos hasta con nuestros compañeros de clase,

-«Es que no tuve tiempo de estudiar. Me la pasé de fiesta y por eso no acabé. Había mucho ruido junto a mi asiento. Es que no he dormido bien, etcétera…»

Aunque llegamos a decir que no nos importan otras opiniones,

aún así buscamos dar explicaciones, y se las damos hasta quien no se las merece, obviamente para justificar que el problema no tuvo origen en nuestro en nuestra persona, queremos hacer creer a los demás que ese digamos tropiezo es ajeno a nosotros, o a mí.

Cuando le tienes que rendir cuentas a otra persona, o reportar avances, te sientes a prueba.

Al ser sometidos a pruebas o al escrutinio de alguien más, puede ser de un profesor, de un calificador o alguien que nos vaya a avalar oficialmente (como la evaluación anual del desempeño), sentimos algo más que un compromiso moral por superar la prueba, y lo que sucede es que:

Al vernos obligados a ser calificados, percibimos que nuestras capacidades y competencias están en tela de juicio. ¿Somos buenos o no lo somos tanto?, ¿Aprobamos o reprobamos?, ¿Pasamos el examen o lo suspendemos?

Y, aunque superemos las pruebas, también podríamos lograrlo por la mínima calificación, con una nota mediocre (como un 6 ó 7 sobre 10), y eso nos preocupa.

Después de NO aprobar, o aprobar con resultados pobres nos sentimos señalados, vemos que nuestra Marca Personal NO refleja eso que quisiéramos: Dominio, buen conocimiento, capacidad, seguridad, calidad, excelencia,

Para verte sometido verdaderamente a prueba tienes que tener la posibilidad de perder algo.

Saber que perdiste algo te afecta interiormente, o te duele en el orgullo, los angloparlantes suelen decir: No pain no gain (Si no duele no hay ganancia).

Debes entender y sentir que si no superas el reto eso te afectará directamente:

Puede ser perdiendo dinero, el dinero que te costó la inversión en tu proyecto (porque tu negocio fracasó), o

el dinero que te costó el curso o el examen de calificación (porque no lo aprobaste, o lo abandonaste, lo cual es peor), o

el crédito para el arranque del negocio, porque aunque salga mal el asunto de todas formas lo tienes que pagar hasta con intereses, o

porque perdiste tu tiempo, lo que también es duro ya que

el tiempo perdido no tiene precio, dado que no se puede recuperar, especialmente si no percibes el beneficio que tuviste en cuanto a aprendizaje o mejora de tus destrezas, y

lo que también puedes perder es tu orgullo,

que muchas veces es lo que más nos importa, aunque no deberíamos darle tanto peso, pero nuestro ego se ve golpeado por el fracaso:

«Van a ver que no soy capaz, que no puedo con el reto, van a descubrir cómo soy realmente, verán que abandono lo que empiezo, que soy flojo, inconstante, inconsistente, irresponsable, perezoso».

No queremos vernos sometidos a pruebas de mucha presión porque todos van a ver que no pudimos con el reto.

Aunque sabemos que no debería preocuparnos lo que otros piensen de nosotros, es verdad que nos inquieta, por eso queremos mejorar nuestra marca personal, porque ésta depende en gran medida de la opinión de los demás.

«La Marca Personal es la opinión que tienen los demás en función del valor que somos capaces de aportarles».

Desde el momento que decidimos reportar avances y resultados a otros estamos haciendo un compromiso.

Nos podemos comprometer a reportar avances con nuestro jefe, con nuestros clientes o con nuestros compañeros de Grupo Mastermind; y, pon atención especial porque:

Los compromisos son un arma de doble filo, ya que pueden implicar tanto lo bueno como lo malo: dedicación o desatención, responsabilidad o irresponsabilidad, orgullo o vergüenza, satisfacción o pesadumbre, seriedad o liviandad.

Cada persona establece compromisos de acuerdo a sus propios valores y parámetros, y debe cumplirlos, le paguen o no, eso demuestra que uno es una persona íntegra, esto es lo que significa ser un profesional.

De las reuniones entre colegas y similares.

Juntarse con colegas u otros profesionales para conversar un rato, para comentarse sus actividades y proyectos está bien.

La retroalimentación es de enorme utilidad,

pero juntarse sin un mínimo grado de exigencia mutua, sin establecer un serio compromiso, sin regularidad, o existiendo mucha flexibilidad de por medio, podríamos denominarlo:

Coaching colectivo, o Consultoría entre colegas, o plática informal entre amigos,

Por supuesto que juntarse entre colegas tiene sus ventajas y pueden generarse ideas innovadoras.

Pero, una reunión sin compromisos preestablecidos realmente NO funciona como propulsor para alcanzar metas, es como una retroalimentación light, o descafeinada.

Reunirse a nivel personal o vía remota (por videoconferencia) sin darle un debido registro a los objetivos de todos,

sin que nadie lleve un control actualizado de los avances de cada miembro del Grupo Mastermind (sin reportar avances), no tiene mucho sentido.

Cómo prepararse para Videoconferencias o Reuniones remotas.

Si nadie vela por darle un debido seguimiento al desempeño de otro compañero, entonces se carece de un acicate.

En esta situación no hay un elemento que te fuerce a llegar a la meta, así no vas a poder verte obligado alcanzar el siguiente nivel, porque no existe un mínimo grado de exigencia.

Existen muchos emprendedores y emprendedoras que no necesitan reportarle nadie, porque cuentan con  un alto nivel de auto-exigencia, se gestionan a sí mismos con gran disciplina; y aquí en varias emisiones suelo proponerlos como ejemplos .

Para poder progresar, uno siempre necesita ponerse a prueba.

Reportar avances a otros NUNCA es fácil.

El hecho de reportar avances a otros no es sencillo, sean o no tus jefes, como tampoco es fácil dar justificaciones a tus padres, o tener que explicar tu bajo rendimiento a tus maestros, o a tus socios.

El hecho de tener que reportar avances y resultados a otros es un trámite que incluso puede incomodar, y está muy bien que incomode, porque eso indica que nos está sacando de nuestra zona de comfort.

Cuando reportamos resultados con comodidad.

Si estamos muy relajados con el trámite de reportar avances a un jefe o a nuestros compañeros de Grupo Mastermind, puede ser por dos causas:

UNA. La positiva.-

Deseamos reportar avances a otros por que todo va bien, ya que dominamos el asunto, vamos avanzando hacia el objetivo como se esperaba, y sentimos que todo va sobre ruedas.

¿Reportar avances y datos positivos siempre es un gusto!. o

DOS. La negativa.-

Deseamos reportar avances a otros porque NO nos estamos viendo lo suficientemente exigidos. NO estamos sintiéndonos forzados a superarnos ni a nosotros mismos ni al que reto que enfrentamos, ya que lo dominamos, esto NO nos aporta crecimiento.

Es como si un físico teórico tipo Albert Einstein presenta un examen de matemáticas de secundaria, ésto lo resolvería con total comodidad, no le causará tensión ni sobresaltos, dado que ésto NO lo empuja al límite de sus capacidades.

Cuando justificar resultados nos incomoda también nos beneficia.

Si el trámite de rendir justificaciones a otros nos incomoda,

o no nos gusta, o nos molesta porque nos sabe mal, eso solo quiere decir que No lo estamos haciendo bien.

Si estamos renuentes a reportar avances y resultados, eso indica que algo nos hace falta como profesionales, o estudiantes, o emprendedores, y

esto se puede deber a que no tenemos disciplina ni para trabajar ni para dar resultados, o que no estamos dando la imagen que quisiéramos reflejar, o que nos sentimos exhibidos como incompetentes, o inconsistentes;

en estos casos quisiéramos no tener que reportar avances a nadie, o pos-ponerlo lo más que se pueda.

Si por el contrario, lo que más deseamos es estar reportando o rindiendo cuentas,

quiere decir que los problemas no provienen de nosotros como personas o profesionales, esto indica que las dificultades son ajenas a nuestro desempeño, implica que los problemas no los generamos, y

Por eso nos urge reportar. Ya nos interesa mucho reunirnos con nuestro jefe o compañeros, para plantearles alternativas de soluciones y pedirles consejos o retroalimentación.

Ponemos empeño en estar en las juntas de seguimiento porque porque tenemos la certeza de que nuestra imagen no está en entredicho, así reportando a otros proyectamos responsabilidad, interés, profesionalismo y seguridad en lo que hacemos.

El hecho de rendir cuentas demuestra que uno es responsable de cumplir sus obligaciones, vayan bien o mal las cosas.

Para tener un mínimo grado de progreso profesional, o de evolución empresarial hay que reportar avances a otros profesionales, no lo podemos posponer.

A pesar de los problemas existentes, un profesional demuestra su valor cuando responde por sus acciones y misiones.

Usualmente, a nuestro jefe no le queremos rendir cuentas seguido porque es muy exigente.

Puede que nuestro superior sea más exigente que nosotros con uno mismo, lo cual está mal. Pero, si alguien es un buen supervisor, no tendrá porqué tolerar nuestro bajo rendimiento, y eso lo sabemos.

Los compañeros del Grupo mastermind no son tan exigentes como un Jefe,

porque NO nos pueden castigar, ni amenazar, ni poner límites, pero uno es profesional, y uno es consciente de que no puede presentarse a una junta de seguimiento con justificaciones infantiles.

Cada profesional sabe que tiene que cumplir con sus compromisos, también con uno mismo y con el equipo mastermind.

Todos los compañeros Matermind esperan que cada integrante se supere a sí mismo, y que ayude a los demás.

Equivocarse o fracasar no es malo, poner pretextos y contar cuentos chinos si que lo es, y afecta la marca personal.

Se adquieren habilidades que mejoran el rendimiento.

Una de las ventajas de reportar no solo a un Jefe sino a un Grupo Mastermind es que uno mejora su propio rendimiento, y al hacerlo incrementa su seguridad, dado que va descubriendo que se supera en cuanto a competencias y habilidades.

Al reportar resultados con periodicidad uno experimenta una mejoría en la gestión de asuntos, y eso lo proyecta positivamente hacia el resto de compañeros.

Cuando todos los miembros Mastermind tienen esa sensación de progreso personal,

quiere decir que allí se está generando una sinergia positiva, una que no se encuentra en la soledad del individualismo.

El compromiso de reportar a alguien más nos obliga a ser más creativos, tanto para resolver nuestros problemas como con la aportación que hacemos para solucionar los problemas de los demás.

Nuestros compañeros son tan o más importantes que nosotros, porque siempre nos tienen en cuenta, a ellos les debemos lealtad y compromiso.

Los miembros de un Grupo Mastermind no solo estamos concentrados en resolver nuestros asuntos, nos debemos a los otros compañeros, y además nos esforzamos por aportarles el valor que ellos nos han dado; buscamos ideas que mejoren el trabajo de todos.

Reportar responsablemente es el pegamento que une el compromiso con el resultado. -Bob Proctor.


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